Llegué y volviste la mirada. Ese fue el comienzo de nuestro juego.
Verdades aquiladas, disfrazadas. Corrompidas. Tu sabor que no se va, tu locura que no vuelve; y yo que sigo esperando. El cielo que pesa, y me comprime; ya no es azul, tampoco gris - y quisiera que al menos fuese gris- . ¿Algo un poco más cierto que esta mezcla de colores que me descoloca, que me cega? Busco respuestas y encuentro sólo tu voz lejana, riendo.
Canciones gastadas, arpegios que matan. Un ritmo que va a terminar conmigo. Notas que fueron dulces, y que en este momento solo me humillan. Y vos, que seguís jugando.
Yo que tengo cosas que hacer, y vos que seguís jugando; jugando conmigo y con vos.
Te pido ayuda, auxilio, apoyo. Te pido que vuelvas. Que me abraces. Contención.
Y vos jugás.
Intento dibujar mi camino, bosquejarlo. Vos, siempre vos, con tu lúdico olvido marcas mis intentos. Borras el sendero, lo cambias. Lo redireccionas.
Ahora todo me duele. Te sangro. Nada de lo que pueda hacer me da sosiego. Me haces obedecer. Obedecer a nada, si ni siquiera estás.
Siempre vos. En el momento oportuno.
Yo que te necesito, y vos que jugás.
Vos, que fuiste mi amor, mi verdad. Jugás.
Sigo escuchando tu canción. Y sigo tragando veneno. Camino, peleo. Pero vos jugás.
Verdades aquiladas, disfrazadas. Corrompidas. Tu sabor que no se va, tu locura que no vuelve; y yo que sigo esperando. El cielo que pesa, y me comprime; ya no es azul, tampoco gris - y quisiera que al menos fuese gris- . ¿Algo un poco más cierto que esta mezcla de colores que me descoloca, que me cega? Busco respuestas y encuentro sólo tu voz lejana, riendo.
Canciones gastadas, arpegios que matan. Un ritmo que va a terminar conmigo. Notas que fueron dulces, y que en este momento solo me humillan. Y vos, que seguís jugando.
Yo que tengo cosas que hacer, y vos que seguís jugando; jugando conmigo y con vos.
Te pido ayuda, auxilio, apoyo. Te pido que vuelvas. Que me abraces. Contención.
Y vos jugás.
Intento dibujar mi camino, bosquejarlo. Vos, siempre vos, con tu lúdico olvido marcas mis intentos. Borras el sendero, lo cambias. Lo redireccionas.
Ahora todo me duele. Te sangro. Nada de lo que pueda hacer me da sosiego. Me haces obedecer. Obedecer a nada, si ni siquiera estás.
Siempre vos. En el momento oportuno.
Yo que te necesito, y vos que jugás.
Vos, que fuiste mi amor, mi verdad. Jugás.
Sigo escuchando tu canción. Y sigo tragando veneno. Camino, peleo. Pero vos jugás.
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